Historia del canal

  • 1510

    La Acequia Imperial

    Ya en 1510 los Jurados de Zaragoza pidieron al Rey Fernando el Católico el privilegio de sacar del Ebro una acequia para mejorar y extender los riegos de la huerta meridional de Zaragoza. Gil de Morlanes redactó un proyecto aceptado por Carlos I en 1529 para construir la Acequia Imperial y durante 10 años se construyó en Fontellas una presa de sillería (aguas abajo de la actual), una casa de Compuertas (el hoy llamado Palacio de Carlos V) y una acequia desde El Bocal hasta Gallur. Las dificultades económicas y políticas, unidas a los problemas técnicos impidieron que las obras llegaran a su fin.

  • 1772

    Todo cambió el 9 de mayo de 1772 al nombrar el Conde Aranda a Ramón de Pignatelli protector del Canal, cuya idea era construir un Canal que comunicara el Cantábrico con el Mediterráneo, aunando la necesidad de saciar los regadíos de la ribera alta del Ebro y de cubrir los deseos de navegación que permitiera transportar directamente sus productos agrícolas hasta el mar. En 1782 las aguas ya cruzaban sobre el río Jalón por el grandioso acueducto que actualmente se encuentra en servicio. En ese mismo año, llegaron las aguas del canal a la ciudad de Zaragoza y Pignatelli mandó construir una fuente de gruesos chorros junto a las esclusas de Casablanca, como celebración y memoria de este sorprendente logro: es la conocida Fuente de los Incrédulos, donde se puede leer una inscripción en latín que reza:

    INCREDVLORVM CONVICTIONI ET VIATORVM COMMODO

    (Para convicción de los incrédulos y comodidad de los caminantes)

    1772

  • 1786

    En 1786 se inauguran los Puertos de Casablanca y Miraflores y en 1790 se colocó la última piedra de la Nueva Presa de El Bocal.
    En 1799 pasó a depender de la Junta de Caminos y Canales y en mayo de 1873 se constituye la Junta Administrativa del Canal Imperial, siendo a partir de entonces un Organismo Autónomo hasta 1985, cuando la Confederación Hidrográfica del Ebro lo incorpora a su explotación.

  • 1986

    En 1986 se constituyó la Comunidad General de Usuarios del Canal Imperial de Aragón que agrupa a todos los usuarios y entre otras, tiene las competencias de la recaudación y la administración del agua y apoyo a la explotación de la CHE.

    1986